1) Desmontamos la silla de escritorio, quedándonos
solo con el asiento y la placa que unía la silla a las ruedas. El
tubo que une las ruedas con la silla se quedó en la placa por lo que tuvimos que cortarlo con una
radial.
2) Para conseguir el sistema isofix tuvimos que
comprar una silla de bebé que luego desmontaríamos para quedarnos solo con el
isofix.
3) Cuando tuvimos el rodamiento lo llevamos a un
taller para que lo unieran a unas pletinas y soldaran el isofix a ellas.
4) Con el rodamiento ya preparado y el isofix ya
soldado lo unimos todo a la placa mediante un tornillo y el conjunto lo
atornillamos al asiento.
5) Después con las pletinas que nos habían sobrado hicimos el tope que iba a impedir el movimiento a la izquierda y el
soporte del pestillo para bloquear el movimiento cuando el asiento
estuviese recto. Posteriormente atornillamos el pestillo al soporte fijando así
el movimiento.
6) Ahora teníamos que limitar el giro del asiento. Para
ello, aprovechamos unos agujeros del asiento para acoplar la estructura metálica
con el imán que hará de tope para el giro. Tras ver la amplitud de giro que nos
interesaba, 75º aproximadamente, atornillamos la estructura al
asiento.
7) Para finalizar, unimos la chapa del ordenador al asiento utilizando una remachadora. También
unimos a esa chapa otra de aluminio que servirá para proteger el asiento del
coche de posibles desperfectos.
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